Visiones de Trump y Harris: impuestos y crecimiento económico contrapuestos
MadridLa elección que se avecina podría cambiar los impuestos federales. Trump busca otorgar recortes fiscales a los ricos y a las empresas, ya que considera que esto impulsará el crecimiento económico. Por otro lado, Harris quiere apoyar a la clase media mediante programas sociales y deducciones fiscales específicas.
Enfoques Económicos: Trump vs. Harris
- Enfoque de Trump
- Reducción de impuestos para empresas y personas adineradas
- Eliminación de impuestos sobre propinas e ingresos de la Seguridad Social
- Aranceles amplios a las importaciones
- Enfoque de Harris
- Asistencia para el pago inicial de viviendas para los compradores primerizos
- Créditos fiscales para nuevos padres y emprendedores
- Aumento de la tasa de impuestos corporativos y tributos sobre ganancias no realizadas
Trump desea mantener sus recortes de impuestos de 2017, que están a punto de expirar. Planea reducir la tasa de impuesto corporativo al 15%, lo que costaría alrededor de $6 billones en diez años. También pretende dejar de gravar las propinas y los ingresos de la Seguridad Social, lo que podría afectar la estabilidad futura de esta última. Aunque sostiene que estos cambios impulsarán el crecimiento económico, durante su presidencia, el crecimiento económico anual promedio nunca superó el 3%.
Harris está adoptando un enfoque prudente. Quiere financiar sus planes, como la ayuda para pagos iniciales y mayores deducciones fiscales, gravando más a las grandes empresas y a las personas ricas. Según el Penn Wharton Budget Model, sus medidas recaudarían $1.1 trillones al aumentar el impuesto corporativo al 28%. Sin embargo, sus planes también podrían generar $2.3 trillones en nuevos gastos. Aunque sus ideas buscan apoyar a la clase media, los modelos económicos sugieren que podrían ralentizar el crecimiento económico más que el enfoque de Trump.
Las tarifas son otro problema importante. Trump propone imponer tarifas elevadas a las importaciones, especialmente de China, para fomentar la manufactura nacional. No obstante, esta estrategia podría aumentar los costos para los consumidores estadounidenses. Una tarifa del 20% podría costar a una familia típica $4,000 anuales. Aunque Trump asegura que estas tarifas no causarán inflación, el encarecimiento de las importaciones podría elevar los precios al consumidor. Harris sostiene que esta estrategia perjudicaría a la clase media al incrementar sus gastos.
Otro tema relevante es la deuda. A Trump no le preocupa el aumento de la deuda federal. Sus recortes de impuestos incrementarían los ya pronosticados $22 billones en déficit en la próxima década. Es poco probable que el crecimiento económico compense este aumento de la deuda, lo que dejaría a la economía en riesgo.
Harris planea equilibrar el presupuesto equiparando los gastos con los ingresos. Sus políticas podrían tener un impacto notable en la economía. Reducciones en los ingresos de los más ricos podrían traducirse en menos inversiones, lo que podría ralentizar la actividad económica a largo plazo. Sin embargo, Harris busca reducir la desigualdad de ingresos y ofrecer un apoyo más rápido a las clases media y trabajadora.
Los dos candidatos tienen planes diferentes, cada uno con sus propias ventajas y desventajas. Uno propone recortes de impuestos y aranceles, mientras que el otro sugiere programas sociales y mayores impuestos corporativos. El enfoque del nuevo presidente tendrá un gran impacto en la economía de EE.UU.
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