La hipertensión crónica durante el embarazo se duplicó en EE. UU. entre 2008 y 2021.

MadridLos casos de hipertensión crónica durante el embarazo se duplicaron en EE.UU. desde 2008 hasta 2021. A pesar de este incremento, alrededor del 60% de las mujeres embarazadas continúan usando la misma cantidad de medicación para la presión arterial. La hipertensión crónica en el embarazo se refiere a tener presión arterial alta antes de quedarse embarazada o antes de las 20 semanas de gestación. Tratar la presión arterial alta leve o moderada durante el embarazo puede ayudar a prevenir la hipertensión severa y la preeclampsia, que pueden dañar el hígado o los riñones y aumentar el riesgo de problemas cardiacos en el futuro.

Principales hallazgos de la investigación:

• La tasa de diagnóstico de presión arterial alta durante el embarazo aumentó de 1.8% a 3.7% entre 1.9 millones de embarazos entre 2008 y 2021.
• No hubo un cambio significativo en el uso de medicamentos para la hipertensión a pesar de las nuevas directrices de 2017.
• Más individuos con presión arterial alta tenían 35 años o más, vivían en el sur y presentaban otras condiciones crónicas.
• El uso de medicamentos para la presión arterial alta se mantuvo estable, oscilando entre el 57% y el 60% durante el período de estudio.

La investigación utilizó datos de reclamaciones de seguros de salud privados entre 2007 y 2021, abarcando información de millones de personas cada año. La muestra incluyó reclamaciones por atención médica privada y recetas de farmacias ambulatorias. Una limitación destacada del estudio es que solo se rastrearon las recetas dispensadas, sin verificar si las personas tomaron la medicación según las indicaciones.

Los tipos de medicamentos para la presión arterial alta han cambiado con el tiempo. El uso de metildopa e hidroclorotiazida disminuyó del 29% al 2% y del 11% al 5%, respectivamente. Por otro lado, el uso de labetalol y nifedipina, que ahora son los medicamentos recomendados para la hipertensión crónica en el embarazo, aumentó del 19% al 42% y del 9% al 17%.

La Dra. Sadiya S. Khan de la Escuela de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern señaló que casi una de cada tres personas con hipertensión prolongada pueden tener complicaciones durante el embarazo. Subrayó la importancia de prevenir y controlar la hipertensión para mejorar la salud de las madres.

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El estudio subraya el creciente problema de la hipertensión crónica y la mala salud cardíaca en las mujeres antes del embarazo. Es fundamental abordar estas cuestiones para asegurar que las madres sean más saludables. Los hallazgos coinciden con estudios previos que han demostrado un aumento en la presión arterial alta en la población de Estados Unidos, según el Sistema Nacional de Estadísticas Vitales.

Las directrices de 2017 de la American Heart Association y el American College of Cardiology actualizaron los criterios para diagnosticar la hipertensión. Recomiendan medicación para adultos no embarazados con hipertensión de etapa 2 y para aquellos con hipertensión de etapa 1 que padecen diabetes, enfermedad renal o que tienen un riesgo del 10% o mayor de desarrollar enfermedades cardiovasculares.

El estudio reveló que no se registraron cambios significativos en el tratamiento de la hipertensión durante el embarazo tras la implementación de las nuevas directrices. Stephanie Leonard, Ph.D., epidemióloga de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford, destacó que, aunque la tasa de hipertensión en el embarazo se ha duplicado, el uso de medicamentos para su tratamiento se mantuvo en un 60%, lo cual probablemente es inferior a lo recomendado.

El estudio subraya la importancia de mejorar la atención y el tratamiento de la hipertensión durante el embarazo para evitar complicaciones.