Alianza inesperada: gobernador Cox y Trump en controversia por foto

MadridEl Gobernador de Utah, Spencer Cox, un republicano moderado, ha generado controversia al unirse con el expresidente Donald Trump. El problema surgió cuando la campaña de Cox usó una foto tomada en el Cementerio Nacional de Arlington junto a Trump en un correo de recaudación de fondos. El cementerio no permite actividades relacionadas con elecciones, lo que podría hacer que esta acción sea ilegal. La campaña de Cox se disculpó rápidamente, mientras que el equipo de Trump afirmó que tenían permiso para tomar la foto en el área restringida.

Varios factores hacen que esta alianza sea desconcertante:

• La prioridad de Cox en la unidad frente a la retórica divisiva de Trump.
• El riesgo para la base moderada de seguidores de Cox.
• La limitada influencia de Trump entre los republicanos de Utah.

Cox corre el riesgo de perder el apoyo de los votantes moderados que lo ayudaron a ganar anteriormente. La confianza de los votantes es difícil de recuperar una vez perdida. Algunos moderados en Utah, como Kyle Douglas de Orem y Lucy Wright de Provo, ya están decepcionados. Sienten que Cox ya no comparte sus valores.

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Trump no tiene tanta influencia en Utah como en otras zonas republicanas. La política de Utah está influenciada por los valores de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, que no encajan bien con el estilo de Trump. Ha tenido dificultades para obtener el apoyo total de los republicanos de Utah, lo que hace que el respaldo de Cox a Trump parezca cuestionable.

El incidente en Arlington pone de manifiesto el problema de mezclar la política con los símbolos nacionales y lugares sagrados. La ley federal prohíbe hacer campaña en cementerios nacionales, pero la campaña de Cox violó esta norma, enfrentándose a críticas y problemas legales. Esto perjudica la reputación de Cox como un candidato honesto y ético.

La colaboración de Cox con Trump plantea muchas incógnitas. ¿Busca ganar más apoyo entre los republicanos o simplemente mantenerse relevante en el partido de Trump? De cualquier manera, esta decisión parece arriesgada y compleja, poniendo en jaque el futuro político y la reputación de Cox.